En el post anterior hablaba sobre como el gobierno italiano estaba tratando que los contribuyentes dejaran de evadir el pago de impuestos, y como pedía a la iglesia que lo ayudara en esa tarea, así como la respuesta de uno de los representantes de ésta. Esta respuesta subrayaba como todas las instancias del estado italiano se dedicaba a desperdiciar los dinero públicos de distintas maneras. Entre las que no nombra el sacerdote en cuestión está el pago de los sueldos de los miembros del parlamento.
Italia posee los parlamentario más caros de Europa, quienes tienen un salario base de 9.980 euros mensuales, aproximadamente el monto anual de mi beca. El salario mensual de estas personas puede se desglosado de la siguiente manera (Fuentes: 1 y 2, en italiano):
Italia posee los parlamentario más caros de Europa, quienes tienen un salario base de 9.980 euros mensuales, aproximadamente el monto anual de mi beca. El salario mensual de estas personas puede se desglosado de la siguiente manera (Fuentes: 1 y 2, en italiano):
- Indemnidad Parlamentario: €5.486,58
- Gastos de Representación: €4.003,11
- Reembolso obligatorio de los gastos para el mantenimiento del contacto con los electores: €4.190
- Reembolso de los gastos para ir desde el lugar de residencia al aeropuerto más cercano para tomar un avión a Roma: entre €3.324,70 (para distancias inferiores a 100 km) y €3.995,10 (para distancias mayores a 100 km) (pago trimestral)
- Reembolso por gastos de teléfono: €3.098,73 (anuales)
- Son eximidos del pago tanto de peajes como de pasajes aéreos, marítimos o ferroviarios dentro del territorio italiano.
Como verán, los parlamentarios italianos gozan de una serie de privilegios que los ponen bastante por encima del ciudadano medio. Poseen no sólo sueldos altos, sino una serie de prebendas que les facilitan la vida increíblemente. Mantengamos estos números presentes mientras relaciono el título de este post con su contenido, dado que esos números son importantes para el final de la siguiente historia.
Sexo y droga: entra el honorable Cosimo Mele.
El 29 de julio pasado los diarios anunciaban que una prostituta había terminado en la emergencia del Hospital "San Giacomo" de Roma por sobredosis de cocaína, luego de haber pasado una noche de sexo, drogas y alcohol con un parlamentario de segundo plano1 y una colega.
La dama, una joven italiana de 29 años, había llamado una ambulancia diciendo que sentía muy mal, que se estaba muriendo. Trasladada de emergencia al hospital, donde es salvada, comienzan las investigaciones para tratar de establecer las causas de su estado. Se convoca a su compañera a la comisaría, donde es interrogada y su versión cotejada con la de la víctima. Ambas concuerdan (Fuente: 3)
El 30 de julio, los diarios revelan la identidad del parlamentario: Cosimo Mele, diputado de la UDC (Unión de Centroderecha) originario de Brindisi (Puglia). Es él mismo quien reconoce los hechos, pero dice que ignora que cosa ha consumido la muchacha para sentirse mal. Él sostiene que se fue a dormir, y que no se dio cuenta de lo mal que estaba la muchacha. Es en este momento que empiezan otras investigaciones, relacionadas con las drogas presentes en la habitación del hotel donde ocurrieron los hechos: quién las trajo. El diputado sostiene que fue la misma muchacha, que él estaba al oscuro de todo. Ella, por otro lado, sostiene que él fue quien proporcionó la droga. A estas alturas todavía no se sabe quien de los dos fue quien trajo la cocaína a la habitación. Como decía el enlace anterior, la cosa resultaba una cuestión totalmente privada hasta el momento en que se empezó a averiguar el origen de la droga (Fuente: 4, 5).
Este escándalo provocó la renuncia del parlamentario, así como diversas reacciones que van desde la condena (no muy fuerte) hasta el mea culpa de sus compañeros. También provocó que a los pocos días, en un gesto un tanto estúpido, algunos parlamentarios de derecha, especialmente del partido de Mele, la UDC, se hicieran públicamente exámenes toxicológicos.
Indignación: habla el secretario Lorenzo Cesa.
La dimisión de este hombre era lo mínimo que podía hacer, mientras continúan las investigaciones, dado que fue descubierto in fraganti cometiendo dos delitos, como lo son la prostitución y la tenencia y consumo de drogas. Lo condenable de esta situación no fue tanto lo que hizo el tipo, a fin de cuentas ese es un problema suyo y de su esposa si consume drogas y/o hace uso de prostitutas, sino la respuesta de su jefe, el secretario de la UDC Lorenzo Cesa.
El señor Cesa nos dice que la vida del parlamentario es una vida muy dura, debido a la soledad que los embarga (él fue eurodiputado): están lejos de su tierra y familia, por lo que entiende que algunos de sus colegas empujados por la soledad hagan cosas como esta (¿tener sexo con dos mujeres simultáneamente entra dentro de la cotidianidad de algunos parlamentario?, ¡coño, ni en pornoland!). Lo condenable es la sugerencia que da el hombre para evitar este tipo de cosas: incremento del sueldo de los diputados para que puedan traerse sus familias a Roma (Fuente: 6).
¿Disculpa?, es decir que tener un sueldo base de 9.980 euros no es suficiente para traerse a la familia a vivir a Roma. ¿Y qué queda para uno que gana más o menos eso en un año?2. ¡Coño!, yo vivo con eso por un año en la ciudad más cara de Italia, y este tipo sostiene que no es suficiente. Para más ñapa, el tipo parece olvidar que los eurodiputados italianos son los mejor pagados de Europa. Y quieren más plata, ¿no les parece que es como una bofetada al contribuyente?, ¿no saben que gracias a las leyes laborales que ellos han aprobado han creado una casta de trabajadores sobreprotegidos y una horda de trabajadores precarios que sobreviven con trabajitos mal pagados?. ¿No les da vergüenza que ganan varias veces que un profesor universitario o de liceo, quienes hacen un trabajo mil veces más importante que él de ellos?, ¿es que no les da pena?. ¡Y luego vienen y nos dicen que está mal evadir impuestos!, ¡coño!, ¿cómo le dices a alguien que no evada impuestos cuando el dinero que paga se usa para mantener unos parásitos?. Como diría Kareta ¡explícame!, porque no entiendo.
Por supuesto, estas declaraciones fueron fuertemente criticadas por todos los exponentes de todas las fuerzas políticas. Recuerdo las declaraciones que dio el diputado de "Rifondazione Comunista" Vladimir Luxuria en las que hacía referencia al tiempo que debía pasar un inmigrante acá en Italia antes de poder pensar en traerse a su familia.
Después se preguntan por qué la gente desconfía de los políticos italianos, por qué un libro como "La Casta" de Sergio Rizzo y Gian Antonio Stella3 tenga tanto éxito. Tiene éxito porque revela la clase de los políticos italianos: muy baja.
1De esos que sólo forman parte de la comparsa, que nadie conoce y sólo sirven para votar por la línea del partido.
2Para los curiosos: gano €10.000,00 al año, los cuales se reducen un poco luego de pagar seguro social y similares. Por ser una beca, no pago impuesto sobre la renta, más por el extra que me pagan por dar clases y colaborar con el laboratorio me clavan un 30%.
3Este libro trata sobre como la clase política italiana desperdicia los dineros públicos para beneficiarse a sí misma, desde la compra de influencias hasta el simple parasitismo en donde los políticos cobran sin hacer nada. Todo un best seller italiano. No lo he comprado porque me molesto enormemente después de haber leído la primera página y no quiero que me suba bruscamente la tensión.
Sexo y droga: entra el honorable Cosimo Mele.
El 29 de julio pasado los diarios anunciaban que una prostituta había terminado en la emergencia del Hospital "San Giacomo" de Roma por sobredosis de cocaína, luego de haber pasado una noche de sexo, drogas y alcohol con un parlamentario de segundo plano1 y una colega.
La dama, una joven italiana de 29 años, había llamado una ambulancia diciendo que sentía muy mal, que se estaba muriendo. Trasladada de emergencia al hospital, donde es salvada, comienzan las investigaciones para tratar de establecer las causas de su estado. Se convoca a su compañera a la comisaría, donde es interrogada y su versión cotejada con la de la víctima. Ambas concuerdan (Fuente: 3)
El 30 de julio, los diarios revelan la identidad del parlamentario: Cosimo Mele, diputado de la UDC (Unión de Centroderecha) originario de Brindisi (Puglia). Es él mismo quien reconoce los hechos, pero dice que ignora que cosa ha consumido la muchacha para sentirse mal. Él sostiene que se fue a dormir, y que no se dio cuenta de lo mal que estaba la muchacha. Es en este momento que empiezan otras investigaciones, relacionadas con las drogas presentes en la habitación del hotel donde ocurrieron los hechos: quién las trajo. El diputado sostiene que fue la misma muchacha, que él estaba al oscuro de todo. Ella, por otro lado, sostiene que él fue quien proporcionó la droga. A estas alturas todavía no se sabe quien de los dos fue quien trajo la cocaína a la habitación. Como decía el enlace anterior, la cosa resultaba una cuestión totalmente privada hasta el momento en que se empezó a averiguar el origen de la droga (Fuente: 4, 5).
Este escándalo provocó la renuncia del parlamentario, así como diversas reacciones que van desde la condena (no muy fuerte) hasta el mea culpa de sus compañeros. También provocó que a los pocos días, en un gesto un tanto estúpido, algunos parlamentarios de derecha, especialmente del partido de Mele, la UDC, se hicieran públicamente exámenes toxicológicos.
Indignación: habla el secretario Lorenzo Cesa.
La dimisión de este hombre era lo mínimo que podía hacer, mientras continúan las investigaciones, dado que fue descubierto in fraganti cometiendo dos delitos, como lo son la prostitución y la tenencia y consumo de drogas. Lo condenable de esta situación no fue tanto lo que hizo el tipo, a fin de cuentas ese es un problema suyo y de su esposa si consume drogas y/o hace uso de prostitutas, sino la respuesta de su jefe, el secretario de la UDC Lorenzo Cesa.
El señor Cesa nos dice que la vida del parlamentario es una vida muy dura, debido a la soledad que los embarga (él fue eurodiputado): están lejos de su tierra y familia, por lo que entiende que algunos de sus colegas empujados por la soledad hagan cosas como esta (¿tener sexo con dos mujeres simultáneamente entra dentro de la cotidianidad de algunos parlamentario?, ¡coño, ni en pornoland!). Lo condenable es la sugerencia que da el hombre para evitar este tipo de cosas: incremento del sueldo de los diputados para que puedan traerse sus familias a Roma (Fuente: 6).
¿Disculpa?, es decir que tener un sueldo base de 9.980 euros no es suficiente para traerse a la familia a vivir a Roma. ¿Y qué queda para uno que gana más o menos eso en un año?2. ¡Coño!, yo vivo con eso por un año en la ciudad más cara de Italia, y este tipo sostiene que no es suficiente. Para más ñapa, el tipo parece olvidar que los eurodiputados italianos son los mejor pagados de Europa. Y quieren más plata, ¿no les parece que es como una bofetada al contribuyente?, ¿no saben que gracias a las leyes laborales que ellos han aprobado han creado una casta de trabajadores sobreprotegidos y una horda de trabajadores precarios que sobreviven con trabajitos mal pagados?. ¿No les da vergüenza que ganan varias veces que un profesor universitario o de liceo, quienes hacen un trabajo mil veces más importante que él de ellos?, ¿es que no les da pena?. ¡Y luego vienen y nos dicen que está mal evadir impuestos!, ¡coño!, ¿cómo le dices a alguien que no evada impuestos cuando el dinero que paga se usa para mantener unos parásitos?. Como diría Kareta ¡explícame!, porque no entiendo.
Por supuesto, estas declaraciones fueron fuertemente criticadas por todos los exponentes de todas las fuerzas políticas. Recuerdo las declaraciones que dio el diputado de "Rifondazione Comunista" Vladimir Luxuria en las que hacía referencia al tiempo que debía pasar un inmigrante acá en Italia antes de poder pensar en traerse a su familia.
Después se preguntan por qué la gente desconfía de los políticos italianos, por qué un libro como "La Casta" de Sergio Rizzo y Gian Antonio Stella3 tenga tanto éxito. Tiene éxito porque revela la clase de los políticos italianos: muy baja.
1De esos que sólo forman parte de la comparsa, que nadie conoce y sólo sirven para votar por la línea del partido.
2Para los curiosos: gano €10.000,00 al año, los cuales se reducen un poco luego de pagar seguro social y similares. Por ser una beca, no pago impuesto sobre la renta, más por el extra que me pagan por dar clases y colaborar con el laboratorio me clavan un 30%.
3Este libro trata sobre como la clase política italiana desperdicia los dineros públicos para beneficiarse a sí misma, desde la compra de influencias hasta el simple parasitismo en donde los políticos cobran sin hacer nada. Todo un best seller italiano. No lo he comprado porque me molesto enormemente después de haber leído la primera página y no quiero que me suba bruscamente la tensión.
Italia, Política, Corrupción